El churrasco es uno de los mayores placeres gastronómicos de la comunidad gallega. Este trozo de cerdo o ternera es uno de los más codiciados y exquisitos, y su popularidad es tal que no puede faltar en ninguna celebración veraniega, siempre y cuando haya una buena parrilla cerca.
El asado a la brasa es rico, sin exceso de grasas, y contundente, perfecto para celebraciones con buen número de personas.
Son muchos los secretos para hacer un buen churrasco, por eso desde Pulpería Porta Catering queremos mostrarte algunos:
Si vamos a cocinar un trozo de costilla ancha, espolvoreamos los cortes con una salmuera hecha con sal gorda, ajo y laurel.
Para el resto de piezas, tapa, vacío y secreto, solo agrega sal cuando ya estén en la parrilla.
Es fundamental poner cada pieza en su lugar, partiendo de las zonas donde alcanza más o menos calor.
Las brasas deben ser uniformes y utilizar leña de carbón o roble. En este caso, si se produce una llama, debes evitar dársela directamente a la carne.
Dependiendo de la pieza que estemos asando, así es como tenemos que tratarla. Si lo hacemos a fuego lento, porque la costilla es gruesa, la colocaremos primero en el costado del hueso, la volveremos a asar y volveremos al hueso hasta el final.
Intentaremos dar a las piezas restantes solo un turno. El tiempo mínimo para piezas finas es de 20 a 30 minutos.
¡Disfruta!